Un Spinetta inspirado, en una canción que es una de las cumbres de sus últimos discos: Bolsodios. Y una banda que no se queda atrás. Sobre todo atender a los teclados de Claudio Cardone que, desde la densidad de las cuerdas hasta la limpidez del piano (pasando por teclas jazzísticas), mueven a la canción a través de una transformación de climas en sintonía con una letra venida desde dónde?
"todas las cosas que se pierden las tiene en un bolso Dios"... "todas estas estrellas amarillas están para una sola función"... "todas las cosas que conozco se parecen al cielo"... "piel que no es nada más que un pálpito en procura de un vuelo en evasión"... "todas las moradas en la tierra están para una misma diversión"... "muchos de los hombres en rama se venden en un quiosco de fe, fe que se despreocupa de la vida y asciende con su auto elevador"... "amor de mi vida, oye el reclamo de las aves por encima del humo del mundo"...
Pero tal vez lo mejor de la canción sean las interjecciones que entre verso y verso deja escuchar Spinetta, en éxtasis: oh... ah... uh... sí!