sábado, 18 de septiembre de 2010

EL CUERPO DEL SONIDO




Según una conocida tesis de Heidegger, el nombre Occidente, Abendland, no designa el lugar de nuestra civilización sólo en el plano geográfico, sino que la denomina ontológicamente, en cuanto el Abendland es la tierra del ocaso, del poniente del ser. Hablar de una ontología del declinar y ver su preparación y sus primeros elementos en los textos de Heidegger, sólo se puede hacer si se interpreta la tesis de Heidegger sobre Occidente transformando su formulación: no "Occidente es la tierra del ocaso (del ser)", sino "Occidente es la tierra del ocaso (y, por eso, la del ser)". Por lo demás, también otra decisiva fórmula heideggeriana, la que da título a una de las secciones del Nietzsche, "la metafísica como historia del ser", puede ser leída exactamente en el mismo sentido, con tal que se acentúe de manera correcta, es decir, conforme al conjunto del pensamiento heideggeriano. No la metafísica es la historia del ser, sino la metafísica es la historia del ser. No hay, aparte de la metafísica, otra historia del ser. Y así, Occidente no es la tierra en la que el ser se pone, mientras en otra parte resplandece (resplandecía, resplandecerá) alto en el cielo del mediodía; Occidente es la tierra del ser, la única, precisamente en cuanto es también, inseparablemente, la tierra del ocaso del ser.
Gianni Vattimo, en Más allá del sujeto



Keiji Haino & Fuyuki Yamakawa


El artista japonés (nacido en Londres) Fuyuki Yamakawa amplifica el sonido del latido de su corazón con un estetoscopio electrónico. Este sonido activa una serie de bombillas eléctricas que oscilan simultáneamente con el ritmo del latido. A través de técnicas especiales de respiración (siendo la respiración, por su doble función voluntaria e involuntaria, el nexo entre el sistema nervioso autónomo y el somático), Yamakawa altera su ritmo cardíaco y, colocando un micrófono de contacto en su tabique nasal, convierte su cuerpo en una demostración poética de la naturaleza física del sonido. En otras ocasiones, el paisaje sonoro y visual del latido de su corazón sostiene la delicada ejecución de Khoomei, una forma de canto folklórica del Asia central caracterizada por el uso de diplofonía.



Fuyuki Yamakawa